Ayer estaba yo melancólico y me puse a releerme este viejo hilo de un gran coche de un mejor amigo.

Estaba yo ahí con mi gin tonic viendo lo bien que lo pasábamos con tan poca cosa, como nos ayudabamos y lo que nos implicábamos.

Lo que no sabéis de este swap es que durante la parte del cambio de salpicadero, mi garaje cerrado, por entonces "garaje A", estuvo ocupado por el corsa con un millón de trastos allí por medio.

Pues con ese percal, mis padres llegaron de viaje un día antes, como el típico episodio de serie televisiva o película juvenil en que te pillan con todo el marrón por medio, jajaja.

Cuando llegaron con el astra cargado de Cádiz, mi padre pilló un mosqueo muy serio al ver que no podía meter el coche en su garaje, ni en el mio (garaje B). Consecuencia, al día siguiente me quitó las llaves y estuve mucho tiempo sin poder pisar el garaje para trasteos de ningún tipo, jajaja.

Ainsss que risas (ahora).

Un abrazo.