Cuando llevas tanto tiempo trabajando en un coche, dejándote la sangre, la piel, sudor y lágrimas, acaban pasando cosas como estas. A mi padre y a mi nos pasa lo mismo, te dejas los huevos trabajando en el coche, en el verano le pinté las puertas y las aletas y si ves como tengo ya las puertas te pegas un tiro, las tengo llenas de puñetazos otra vez ..... pero hay que seguir y disfrutar todos los días del coche y recordar todo lo que has disfrutado con el.
Saludos y sal del bache, que no será ni la primera ni ultima vez
"Un delantera se lleva, un trasera se conduce".