El distribuidor de encendido está sujeto por un solo tornillo, y puesto "a presión" con una tórica en la culata (o culatín). Aflojas ese tornillo, y tienes libertad para girar el distribuidor completo. Según lo gires en un sentido o en otro, atrasas o adelantas el punto de encendido. Es decir, provocas que la chispa salte un poco antes o un poco después en el momento del ciclo de compresión.