Aunque no tengo el gusto de tener un Vectra con independiente detrás, y sí un deslizante Kadett, hay un par de detalles bastante relevantes al respecto y que explican esta diferencia.

Principalmente, y quedándonos en Vectra, y únicamente referido al eje trasero, las versiones con eje tirado partido (alias semi trail-arm) tienen un eje de barrido que por una parte suele dar convergencia positiva al eje trasero bajo carga. Este hecho entra en conflicto con que las cargas laterales que sufre el eje en curva tienden a todo lo contrario, a abrirlo, pero ya de entrada, la propia construcción de todo el eje trasero es más rígida y sólida que la de un trail-arm convencional, un eje rígido vaya. En este último, las geometrías quedan a merced de las deformaciones sufridas bajo las cargas, y normalmente, suelen tender a abrir el eje trasero.

Por todo esto, la estabilidad de la versión "independiente", es más notable que la de los convencionales. En el Astra J OPC, por ejemplo y para mitigar este hecho, se monta una barra Watt para paliar estas variaciones indeseadas de los ejes rígidos. El caso más favorable, las independientes multibrazo, por supuesto.

Y sobre el Kadett, pues básicamente, la notable diferencia radica en la menor rigidez del conjunto, tanto en el tren delantero, sea por el propio monocasco o por la cuna que sí monta el Vectra, tanto como por la diferencia del eje trasero.

A ambos coches les separan más años de los que parecen, y eso se deja notar al volante.