El siguiente paso fue abrir el motor del saab.
Lleve a planificar la culata y de paso hacer asientos de válvulas, pulir cámara de combustión, cabezas de válvulas y los conductos de escape, cambiar retenes y revisar las guías de válvulas.
Llevé el cigüeñal a equilibrar con el volante inercia, ya que le puse uno de un C20XE aligerado, además hubo que hacerle un casquillo a medida para ponérselo entre el cigüeñal y el volante ya que quedaba una separación bastante considerable.
Hechos estos ajustes y compre el kit de juntas del motor, tornillos de culata, patinetes de distribución, termostato, bomba del agua, casquillos de bancada, axiales y de bielas.
Pistones y segmentos le dejé los que tenía. Después sacar un pistón pude comprobar que los segmentos estaban en muy buen estado, sin tener un excesivo desgaste, al igual que los cilindros, en los cuales se veían perfectamente las marcas de mecanizado.