Lo malo es que no es muy barato y además no es efectivo cuando la cantidad de porquería es evidente y esta extendida por toda la superficie.
Para rentabilizar compré un limpiador de tapicerias industrial líquido. Hay que disolverlo en proporcion 1:8 en agua y la espuma hay que currarsela con un buen entrenamiento de muñeca rinde muchisimo más, y quizás tenga el pequeño problema de la humedad, puesto que al aplicarlo con la esponja siempre arrastra agua. Con un buen secado al sol, el efecto es perfecto.
Se mezcla, se hace la espuma removiendo, se aplica con una esponja frotando a conciencia y se deja actuar. Después, con un trapo seco se va retirando lo que no se haya evaporado. Finalmente, le pasamos un cepillo de los de la ropa para retirar el polvo superficial.
Podemos aplicarlo a techo, paneles de puertas y como no, asientos. No afecta a plasticos y es recomendable tener el minimo cuidado de la humedad con los temas eléctricos.
Para los plásticos, lo vi mucho más complicado. Los productos industriales suelen tener disolventes multiples, y nunca sabes el efecto que pueden tener sobre el polimero. Sería cojonudo poder disponer de una buena cantidad del estilo de los CRC, pero la economia vuelve a apretar y hay que buscar soluciones alternativas. Aconsejado por la dependiente de una tienda de limpieza industrial, decidi un pulverizador de un limpiador con disolvente muy light, recomendado para cocinas, baños, metales... rollo jaboncito.
El aplicador se hace muy comodo para trabajar y junto con un rollo de papel de celulosa se puede aplicar a los plasticos del coche. IMPORTANTE: antes de disparar a reacción hay que hacer una prueba en alguna parte no vista, como pueden ser los plasticos internos del maletero y ver los limites de accion del disolvente, dejandolo actuar al menos unos 10 minutos. No recomendaria actuar sobre barnizados o pintados medianamente suaves, porque no deja de ser disolvente aunque sea flojito.
Primero, limpiamos bien todo con un trapito muy poco humedo, sacamos el polvo superficial de los paneles de las puertas, de los bajantes de las puertas incluso del salpicadero. Después, vamos dandole al "flush flush" y frotando con el paño de celulosa para que no chorree y queden las marcas (mitico problemon a posteriori). Sin sacarlo del todo, cuando terminemos, ya podemos atacar la primera parte con un trapito de algodon ligeramente humedecido en agua. Por supuesto, evitar de cerca temas electricos de ningun tipo. Y cortarse con el producto que por más echar no limpia mejor. Hay que frotar. El frotar, nunca se va a acabar
El tema de los cristales, yo soy muy conservador. Siempre limpiacristales de toda la vida (el industrial es buenisimo pero no huele rico como los otros) y echar a conciencia.


Con el rollo de celulosa (en los chinos son dos euros y cunde la leche) esparcimos el limpiacristales bien hasta que el paño no absorba mas liquido e inmediatamente, sin darle tiempo a evaporarse, con un papel de periodico (si, de periodico) le frotamos bien bien hasta que quede sequito. El acabado es espectacular. Por dentro y por fuera.
En cuanto a las llantas, y como ya estoy en plan Txumari y su botica de la abuela, pues ya continúo. He probado tantas cosas en coches antiguos. El Vitroclean no va nada mal, aunque desgraciadamente no da nada de brillo, pero la mierda la saca frotando que da gusto. Luego con un limpiador de esos carillos de marca, le das un chorrito y te queda niquelado.

Hay la opción de KH7 o ZORKA para los interiores de la llanta, son desesgrasantes potentes y si los dejas actuar un rato y luego le das con una Karcherr o algo a presión, suelen funcionar más que bien.
Por último y si ya no te llega el presupuesto a nada, hay una opción que os va a dejar gratamente sorprendidos: en los bazares chinos (si, ese increible nucleo de pasta de dientes con gonorrea) tienen un limpiador de cromados que es un bote gris, bastante grande (1L o asi) y que tiene una espuma a spray que forma una capa sobre la llanta. Si esperas un poco y frotas con ganas después, te deja un acabado acojonante sobre la llanta. Y no pone en peligro para nada el lacado que lleve, cosa que es un riesgo con los disolventes. Mucho cuidado siempre con lo que hay detrás y encima de la llanta, que no se le puede pasar el lanzallamas... es una zona ruda, pero no te emociones de más, los arreglos luego son bastante serios económicamente.
Creo que no olvido nada, os voy a dejar para un post siguiente lo que es el cuidado externo y productos especiales para ciertas partes que si os dejais un poco de presupuesto (unos 15 euros por bote) veréis resultados en calidades excelentes.
Un saludo a todos y nos leemos brevemente.