despues de mucho sudor, sangre, lagrimas y unas cuantas cervezas fuimos capaces de arancar (y cuando digo arrancar es arrancar) el dichoso aparato. al final nos curramos unas patillas como me habeis enseñado (doy las gracias por ello) y salio poco a poco.
Conclusion: que el chaval esta contento con su nuevo radio cd, yo me sople unas garimbillas gratis y os da las gracias por vuestra ayuda.

Saludos.