Os comento mi visión sobre el tema refrigeración:

Sobre el anticongelante, y por las zonas donde vivimos, donde dificilmente vamos a arrancar por debajo de -5º, el poder refrigerante del anticongelante convencional con proporciones de mezcla convencionales (30 ~ 50%), es más que suficiente.

Hay un par de condiciones críticas para llegar a extremos, que suelen ser puertos de montaña de baja velocidad y alta carga (si vas cargado, o remolcando, que ya asumo que esto segundo, no), y un factor más, que es la parada repentina y llave fuera. Con porcentajes altos de anticongelante base glicol podemos rozar los 200 ºC de ebullición tan solo a 1 bar de presión de circuito, mientras que con agua destilada, se ven unos 125 rozando el 1,4 bar a los que está tarado el circuito de nuestros coches. Si hablamos de un 50% de proporción, la temperatura sube a 135 ºC.

Llegar a 135 ºC no es fácil si llevas un circuito correctamente dimensionado. Si llegas, es posible que haya alguna anomalía en ese circuito. Dicho esto, y te lo digo desde la experiencia de haber trabajado en estos temas en el pasado, no hay panaceas. Lo que sí es un gran aliado aquí, es implementar el sistema de recirculación post-parada del motor (tiene diversos nombres). Ese es un gran aliado para evitar que en las zonas del motor que están calientes acaparen más calor que el necesario. De no ser así, se prolonga la transferencia del calor a través del propio bloque, por lo que casi es preferible tener un fluido que transfiera ese calor de forma ágil.

De hace tiempo un compañero de departamento me enseñó un benchmark que hizo de pastillas de freno, buen resultado para las DS2500 y las DS Performance, pero mejor estas últimas para un uso de calle.