A mi me parece entretenido.

El dueño ya era así antes de que viésemos repetidos mil veces los capítulos de Fast´N´Loud.

El sitio es precioso y merece la pena una visita. A los que no sabemos de mecánica pero nos gusta investigar colecciones privadas, nos organizaron una visita genial, eso sí, con cita previa.

Ver en persona esos coches, en mi opinión tan bien cuidados es tremendo.

El último capítulo hicieron una fantástica restauración de un MG-A. Creo que lo dejaron impecable de chapa, pintura y tapizados. Luego que el motor no sea todo lo original que a los puristas les gusta, ya es otro tema.

Saludos.