En mi caso, lo tenía bastante claro desde el principio. Primero, un techo. Después, veremos con qué lo llenamos. Estaba incluso dispuesto a pagar y tenerlo vacío, no me suponía problema alguno. Lo que tenía claro era que no iba a comprarme un GSI y que durmiera indefinidamente en la calle a la espera de encontrar un garaje adecuado, porque al final terminas cogiendo cualquier cosa a cualquier precio con tal de tener un techo, y no me gustaba nada la idea.

Ahora, he de reconocer que pocas cosas en mi vida me habían salido tan redondas, en menos de una semana estaba todo zanjado. Un viernes por la tarde vi el garaje, probé a meter el diésel, le di dos vueltas y media y ese mismo viernes cerré el trato. El lunes me dieron las llaves. El martes hablé con el dueño del GSI, el miércoles vino a mi pueblo (por motivos laborales) y quedamos para verlo, y cerramos el trato, y el jueves fui a bilbao a traérmelo.

Todo a pedir de boca. Un saludo! Agur