Mi padre conoció en persona a Pere Navarro cuando era inspector de trabajo. Una persona vil y rastrera que hacía lo que fuera en pro de subir, aunque para ello tuviera que hundir y perjudicar a quien fuera. Así le tiene la tirria que le tiene.

Es como si tienes un jardinero que trabaja con una motosierra sin mango. Y amenazas con dejarle sin sueldo cada vez que se corte. ¿No has pensado en ponerle mango a la motosierra en vez de penalizar al trabajador? Pues así van las carreteras. Vergonzoso. La gente no aprende, pero el gobierno no ayuda, y lejos de esto, se aprovecha.

Un saludo.