Buenas

Isma, imagínate una de las primeras anécdotas de la quedada en Zaragoza:

Nos encontramos todos por fin en el Autogrill y aparece una fragoneta con un grupo de tios y tias entraditos en años y con pintas "guays". El gordo más seboso tiene una camiseta rosa con un cuadro en la espalda quen pone:

"Busco pollones negros y julios judíos" y a continuación un teléfono móvil.

Ni corto ni perezcoso, Kaminaria llama a ese número y resulta que el tío contesta... hay que ser tontito para poner el número de uno.

A partir de ahí cachondeo padre, llamándole con proposiones deshonestas, con Kilm3r en plan forrest gump-obsesión de noche y el tipo que coge un cabreo de la hostia.

Señor que cosas