La aguja apenas llega a 75 grados en marcha y tarda bastante más que antes en llegar, el termostato es nuevo de 89 grados. Estando a ralenti es el único momento en el que llega 90 grados, y justo entonces se escucha un burbujeo en la zona del bote de expansión, tocas los manguitos y están completamente blandos. Además va evaporando el refrigerante (ya he comprobado que ni lo tira ni lo consume) ya que si el tapón no retiene nada de presión su temperatura de ebullición se reduce, igual que una olla a presión, y a 90 grados puede hervir como si fuese agua corriente.