Por fin se les ha ocurrido volver la vista atrás. Hay que desarrollar nuevos coches, pero sin olvidar de donde vienen, de los antiguos. Qué mejor publicidad para un fabricante que tener vehículos con unos cuantos años circulando en muy buen estado (no todos, claro) y pasando ITVs cada vez más severas.
Espero no volver a oir en un concesionario OPEL : "¿es que tienes intención de reparar semejante muerto?", textual, refiriéndose a mi Kadett.