UZIELGAL
13-03-06, 23:57
Buenas
Como el otro día me fuí a darle un voltio al coche por los pueblos de Guadalajara, con mis padres y hermano, hice unas cuantas fotillos, de las que os dejo algunas chulas.
La ruta fue Arganda del Rey-Jadraque-Atienza-Sigüenza-Arganda del Rey.
En Jadraque visitamos el castillo del Cid, en reparaciones pero solo las vistas ya merecen la pena (a pesar de la cuesta que hay que subir a pata).
De ahí partimos por carreteras muy secundarias pero de buen firme hasta Atienza, donde también subimos al castillo atravesando todo el precioso pueblo. La temperatura bajó de 13 a 6 grados y el viento casi nos tumba subiendo al castillo. Las vistas también merecían el esfuerzo.
Repusimos fuerzas con unos torreznos como colchonetas playeras recién hechos y compramos panes camperos como ruedas de grandes, torta de chicharrones y bizcocho casero (recomiendo todo ello, jeje).
De ahí fuimos a Sigüenza, pasando por la poco conocida salina del Rio Salado. Luego en Sigüenza dejamos el coche en el parador del Castillo, lo recorrimos paseando, bajamos por la calle mayor hasta la plaza, vimos la catedral y la plaza y terminamos comiendo en el restaurante El Mesón. Recomiendo el cabrito y el cochinillo, así como las berenjenas rellenas.
Luego hasta Arganda por la nacional, rememorando aquel momento histórico en el que tres coches de la Guardia Civil me retuvieron casi cuarenta minutos. Me debieron tomar por miembro de Al Queda o algo.
Un abrazo y recomiendo la ruta.
Como el otro día me fuí a darle un voltio al coche por los pueblos de Guadalajara, con mis padres y hermano, hice unas cuantas fotillos, de las que os dejo algunas chulas.
La ruta fue Arganda del Rey-Jadraque-Atienza-Sigüenza-Arganda del Rey.
En Jadraque visitamos el castillo del Cid, en reparaciones pero solo las vistas ya merecen la pena (a pesar de la cuesta que hay que subir a pata).
De ahí partimos por carreteras muy secundarias pero de buen firme hasta Atienza, donde también subimos al castillo atravesando todo el precioso pueblo. La temperatura bajó de 13 a 6 grados y el viento casi nos tumba subiendo al castillo. Las vistas también merecían el esfuerzo.
Repusimos fuerzas con unos torreznos como colchonetas playeras recién hechos y compramos panes camperos como ruedas de grandes, torta de chicharrones y bizcocho casero (recomiendo todo ello, jeje).
De ahí fuimos a Sigüenza, pasando por la poco conocida salina del Rio Salado. Luego en Sigüenza dejamos el coche en el parador del Castillo, lo recorrimos paseando, bajamos por la calle mayor hasta la plaza, vimos la catedral y la plaza y terminamos comiendo en el restaurante El Mesón. Recomiendo el cabrito y el cochinillo, así como las berenjenas rellenas.
Luego hasta Arganda por la nacional, rememorando aquel momento histórico en el que tres coches de la Guardia Civil me retuvieron casi cuarenta minutos. Me debieron tomar por miembro de Al Queda o algo.
Un abrazo y recomiendo la ruta.